En el Día de la Mujer nos encontramos con ellas en un interesante espacio, con dos objetivos. Por un lado, conmemoramos la lucha de aquellas mujeres que murieron reclamando una reducción en la jornada laboral, mejores condiciones de trabajo y un salario igual al que recibían los hombres. Si! Siempre, históricamente nos atravesó la desigualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.
Por otro, reivindicamos la lucha de las mujeres, una de tantas. La que nos atraviesa a todas, todos los días. Lucha donde exigimos, principalmente, que nos dejen de violentar y matar. Sabemos que muchas compañeras son violentadas y asesinadas por hombres con quienes tienen (o tuvieron) un vínculo sexo-afectivo. Son asesinadas por quienes dicen amarlas.
Por eso, este taller pretendió crear un espacio para hackear los viejos y nuevos mitos sobre el amor romántico. La intención fue cuestionarlo e interpelarlo para seguir militando el amor y la ternura desde un paradigma más sano y menos violento.
Hubo muchas voces, entre esas la de Romi (que sigue poniendo el cuerpo y voz en medio de otras tantas cosas)… Nos escuchamos desde el respeto y la empatía. Porque para eso nos encontramos… para hacer cuerpo la sororidad.
Por otra parte, en el Paseo del Lago y en Plaza San Martín se fijaron mensajes de sensibilización sobre el tema, en las mesas y bancos de uso público.
